Al menos 44 migrantes murieron esta semana en el desierto del Sahara, entre ellos mujeres y niños pequeños, informaron la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) este viernes.
Los fallecidos intentaban llegar a Libia cuando el camión en que se transportaban dejó de funcionar en medio del desierto al norte de Níger, exponiéndolos al calor extremo y a la falta de agua.
Seis personas sobrevivieron y alertaron a las autoridades en una aldea remota del centro del país africano.
“Las víctimas eran principalmente de Ghana y Nigeria e intentaban llegar a Europa a través de Libia. Los sobrevivientes regresaron a sus países y están recibiendo asistencia de la OIM”, aseguró Leonard Doyle, portavoz de la Organización.
“Está claro que los traficantes hacen lo que sea para explotar a los refugiados y migrantes. Estas terribles muertes hacen parte de la trampa mortal promovida por los contrabandistas desde el Mediterráneo hasta el desierto del Sahara”, agregó ACNUR en un comunicado.
La agencia anunció la apertura de una nueva oficina en la ciudad de Agadez, en Níger, cerca de la ruta de viaje de los refugiados, donde se ofrecerá asilo y ayuda a los migrantes.
Añadió que está aumentando su respuesta en Libia para contrarrestar la crisis humanitaria que empeora gradualmente debido al conflicto, la inseguridad, la inestabilidad política y el colapso económico.
Tanto para ACNUR como para la OIM, esta nueva tragedia en el Sahara es un recordatorio de que se deben buscar alternativas como la reunificación familiar, el reasentamiento y el patrocinio privado para evitar estas peligrosas travesías.
Desde el comienzo de este año, unos 17.000 migrantes han cruzado de Níger a Libia.
Fuente: http://www.un.org