La concejal de Igualdad, Ana Verdú, fue la encargada de leer el manifiesto en el que se mostró el rechazo público y la intolerancia máxima hacia un “comportamiento brutal e insensible” para el que no existe ninguna justificación.
Doce mujeres han sido asesinadas en el mes de julio por sus parejas, cuarenta y dos en lo que va de año. El manifiesto también ha recordado a esas “victimas que permanecen en silencio que sufren celos, acoso, dolor y llanto”.
La violencia machista constituye un problema social grave que se acrecienta día a día y que exige la adopción de medidas integrales, así como acciones preventivas que favorezcan un cambio social y cultural, con medidas educativas y de sensibilización para lograr erradicar este tipo de violencia.
En este sentido, la concejal de Igualdad recordó que el Ayuntamiento de Toledo está ultimando el primer Plan de Igualdad que podría ser aprobado el próximo mes de septiembre por la Junta de Gobierno Local.
Tras la lectura del manifiesto se ha guardado un minuto de silencio en memoria de las víctimas y se han encendido doce velas, que se han depositado a los pies de la escultura dedicada a la mujer toledana, como homenaje a las doce mujeres fallecidas a causa de la violencia de género durante el pasado mes de julio.