El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, suscribió este acuerdo con el presidente de la Fundación Barclays, Carlos Martínez de Campos, y el presidente de la Comisión de Gerencia de la Real Fundación de Toledo, Juan Ignacio de Mesa Ruiz, así como del el director gerente de la Fundación Barclays, Evelio Acevedo.
Este proyecto tiene como objetivo apoyar un programa de formación para la inserción de jóvenes en oficios vinculados a la tradición de la ciudad de Toledo y gracias a él se están formando jóvenes en riesgo de exclusión dándoles una oportunidad en el mercado laboral y enseñándoles una profesión a la vez que realizan un proyecto de rehabilitación de la ciudad de Toledo.
Esta iniciativa, que tiene una duración de cuatro meses,.está siendo ejecutada por el Taller de Empleo vinculado a la Escuela Taller de Restauración del Ayuntamiento de Toledo con la colaboración técnica de la Real Fundación de Toledo.
El convenio, según explicó Martínez Campos, se desarrolla en el marco del programa “Banca para un futuro mejor” de la Fundación Barclays orientado a la integración laboral de personas en riesgo de exclusión.
Una actuación simbólica para “una ciudad viva”
El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, mostró su alegría por el convenio alcanzado hoy para incorporar más financiación a este proyecto, ya que el mismo se trata de una actuación “simbólica” para el Casco Histórico toledano, pues después de muchas décadas con las fuentes completamente abandonadas se están recuperando para el uso y disfrute de residentes y turistas.
García-Page aseguró que este proyecto de rehabilitación forma parte del concepto de “ciudad viva” que el Ayuntamiento de Toledo quiere para el Casco Histórico de Toledo, porque el centro antiguo de la capital regional, aseguró, debe ser un buen lugar para vivir y residir en el mismo debe tener sus privilegios.
En este sentido, el regidor toledano destacó el importante papel que a lo largo de los últimos años se ha desarrollado desde las diferentes administraciones para recuperar patrimonialmente el Casco Histórico, superando los objetivos principales, hasta el punto de que ahora esta rehabilitación se dirija sobre todo a la recuperación y adecentamiento de espacios, rincones y plazas, en paralelo a la recuperación residencial.
“Una ciudad son sus calles y sus viviendas, pero también sus ciudadanos”, afirmó García-Page quien apostó por seguir desarrollando proyectos como el de recuperación de las fuentes “para que en el Casco Histórico se viva”.