García-Page ha destacado que esta intervención no sólo supone la rehabilitación de un edificio emblemático, “sino también la dignificación de todo el entorno”. Por eso, ha puesto en valor que, a pesar de las dificultades actuales, “la ciudad, que tiene en su monumentalidad su mejor industria, no puede pararse” y debe continuar con la realización de proyectos de mayor o menor envergadura.
El alcalde ha defendido la estrategia emprendida por la ciudad de “no sólo conservar lo que nos hemos encontrado, sino mejorarlo y recuperarlo por su valor patrimonial y también por su beneficio económico y práctico”, como es el caso del palacio de Lorenzana, sede de la Universidad de Castilla-La Mancha.
La vicerrectora del Campus de Toledo ha expresado su satisfacción por el resultado de los trabajos realizados y ha resaltado la colaboración entre las instituciones que ha permitido la recuperación de este inmueble.
Obra de Ignacio Haan
El gerente del Consorcio ha señalado que la intervención se ha centrado en las fachadas noroeste y noreste del edificio, que data de 1800 y es una obra representativa de la arquitectura neoclásica cuyo proyecto corresponde a Ignacio Haan. En esta actuación, la Universidad de Castilla-La Mancha y el Ministerio de Cultura participan con 90.000 y 80.000 euros respectivamente del presupuesto, mientras que el Consorcio completa la financiación, que asciende a 447.909,72 euros.
Según ha explicado el gerente del Consorcio, en la fachada norte se ha recuperado el revoco realizado en 1874; mientras que en la parte del callejón que conecta con la plaza de San Vicente, donde ese revestimiento ya ha desaparecido, se ha rescatado el acabado original, que data de 1805. El objetivo de esta entidad es continuar con esta labor para recuperar el esplendor primigenio del edificio.