El pasado 22 de octubre, el jurado del concurso de “Acupuntura Urbana”, organizado por el Ayuntamiento de Toledo en colaboración con el Colegio de Arquitectos de la ciudad, se reunió para galardonar a seis centros educativos que eligieron distintos emplazamientos del Casco Histórico de Toledo para realizar intervenciones “sorprendentes y de gran interés” con las cuales se han acercado a la ciudad a través de un enfoque distinto al habitual.
De esta manera y según consta en el acta del jurado del concurso, se galardonó con el primer premio al I.E.S Sefarad por “la armonía y la belleza de su actuación, la economía de sus materiales, llevados a su máxima expresión con medios mínimos y por la adecuación de su intervención al espacio urbano elegido (plaza de las Carmelitas).
El premio “Imaginación” recayó sobre el I.E.S Carlos III, “por la utilización creativa de los materiales y la transformación de un microespacio urbano. También por el llamamiento a la conciencia ecológica”, en la Travesía de Santa Isabel.
El galardón a la “Interactividad” fue concedido al I.E.S El Greco “por hacer un proyecto abierto a la intervención de los ciudadanos, lo que implica un concepto de ciudad” en el Paseo del Tránsito, mientras que el premio al “Colorido y al contraste” se concedió a la Escuela de Arte de Toledo “por la intervención variada en el espacio urbano, fundiendo varias propuestas provocadoras” en la Plaza de San Juan de los Reyes.
El premio al “Reciclaje” se otorgó al colegio Mayol, “por proponer un nuevo uso al espacio urbano con materiales reutilizados y reaprovechados”, en la Plaza de Santo Domingo el Antiguo, mientras que el premio al “Esfuerzo Colectivo” recayó sobre el I.E.S Universidad Laboral “por la participación de todos y por proponer transformaciones en el espacio mediante elementos plásticos y mediante personajes y eventos, que dan ejemplo de lo que podría realizarse en diversas ocasiones” (Remonte mecánico de Recaredo).
Ángel Felpeto agradeció la labor de los profesores de los centros educativos ya que esta iniciativa, aunque parte del Ayuntamiento debe aprobarse por el Consejo Escolar, y puso en valor la repercusión que ha tenido en la sociedad toledana.
El vicealcalde y concejal de Cultura, Ángel Felpeto, también se mostró muy satisfecho por este evento “ya que ayuda a que la sociedad valore a los jóvenes y no solo piense que hacen botellón”.