El Quixote Crea tiene un plazo de ejecución de 18 meses, se levantará sobre una superficie cercana a los 7.000 metros cuadrados en el entorno de San Lázaro, entre la Avenida General Villalba y la calle Huérfanos Cristinos, y contará con una inversión cercana a los 35 millones de euros.
En el mismo se habilitarán salas polivalentes, que se destinarán a exposiciones, salas de ensayo y talleres dedicados a la creación artística, así como un auditorio de música además del teatro, una sala de exposiciones y un restaurante más una cafetería con terraza.
El proyecto contempla además la remodelación de todo el entorno y la construcción asimismo de un aparcamiento público subterráneo de 500 plazas.
El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, y el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, coincidieron durante el acto simbólico del inicio de las obras en destacar la importancia que esta nueva instalación tendrá en las infraestructuras culturales de la ciudad y su integración en el centro urbano de la capital castellano-manchega.
En este sentido, Barreda aseguró que el "Qvixote Crea" será "un valor añadido" desde el punto de vista de la arquitectura a una ciudad "en la que no se puede hacer cualquier cosa porque es Patrimonio de la Humanidad, pues es una de las ciudades más conocidas e importantes de España y del mundo”.
Además, para el presidente regional, que también destacó la buena manera de hacer arquitectura que supondrá este nuevo centro, la consecución de este proyecto se enmarca dentro de las actuaciones de la celebración del IV Centenario de la Primera Edición del Quijote, cuyo planteamiento era que perdurase en el tiempo con obras y actuaciones visibles como ésta.
Por su parte, el alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, calificó el "Qvixote Crea" como una de esas obras "grandes" para una ciudad, de esas "que hacen época" y que, al mismo tiempo, doblarán la oferta cultural en lo que a representaciones teatrales y artísticas se refiere.
El nuevo centro complementará la actividad cultural que actualmente ofrece en el Casco Histórico el Teatro de Rojas, pero también el Palacio de Congresos en cuanto entre en funcionamiento, ya que en este último edificio también habrá representaciones y actuaciones de diversa índole.
El nuevo teatro-auditorio, además de ampliar la oferta cultural y artística a la zona norte de la cuidas, dará también cohesión urbanística a todo el entorno de San Lázaro, en los antiguos terrenos militares de la Escuela Central de Educación Física y acorde con el Casco Histórico y la parte nueva de la ciudad.