Antonio Guijarro ha señalado que, con esta preocupación, el Gobierno municipal traslada el sentir de los toledanos quienes también han sufrido entre los recortes del Gobierno de Cospedal la paralización de la apertura de los Centros de Salud de Santa Bárbara y Azucaica, que espera entren pronto en funcionamiento.
El hospital general estaba planteado inicialmente por el anterior Gobierno regional para ofrecer servicio para la provincia de Toledo y la capital regional los próximos 40 años, por ello, Guijarro ha calificado de “despilfarro” hacer una obra que “directamente nace insuficiente”.
En relación con la futura gestión del centro sanitario, la cual será privada y no pública, el Gobierno municipal ha lamentado que la Junta de Comunidades prefiera “hacer negocio antes que las personas” y, en este sentido, ha recordado el compromiso que adquirió la presidenta regional en su toma de posesión cuando anunció que no privatizaría ningún hospital.
“Estamos preocupados porque no va a primar el bienestar”, ha señalado el concejal quien considera que hay distintas formas de gobernar y la de María Dolores De Cospedal “no es de fiar”.