Rafael Perezagua ha ofrecido detalles de esta actuación en una rueda de prensa en la que ha acompañado al alcalde de Toledo, Emiliano García-Page y al edil de Gestión de los Servicios, Gabriel González.
El portavoz ha afirmado que esta actuación para la renovación de las tuberías del Casco Histórico y del pavimento de la calle Santa Úrsula se realizará por fases y se acompañará de un estudiado dispositivo de tráfico.
“Esta es una obra necesaria, que requiere la máxima información y cambios importantes desde el punto de vista de la movilidad”, ha señalado, a la vez que ha informado de que la actuación se realizará desde la torre de la Iglesia de El Salvador hasta la plaza del Juego de Pelota.
La bajada de Santa Úrsula es un eje importante para la movilidad del Casco Histórico, además de que se encuentra junto al acceso a un colegio, un hotel y un parking público.
A este respecto, Perezagua ha señalado que se permitirá el acceso a los abonados a ese aparcamiento y que los padres dispondrán de facilidades para recoger a sus hijos.
Las obras, que tendrán una duración de dos meses, requerirán de la colaboración vecinal pues también afectarán al barrio de Santo Tomé al modificarse el sentido del tráfico de la calle El Ángel, durante un espacio de alrededor de 9 días.