El viceportavoz del equipo de Gobierno, Pablo García, ha asistido en la tarde de este viernes al acto de apertura del XXI Congreso nacional de la Federación de Jugadores de Azar Rehabilitados (FEJAR) que tiene lugar en la capital regional durante el fin de semana enmarcado en el 30 aniversario de la organización que preside Máximo Enrique Gutiérrez.
Pablo García, que ha asistido en representación municipal junto a la concejala de Servicios Sociales, Ana Abellán, ha agradecido el “trabajo incansable” de todas aquellas personas que en estas tres décadas han formado y forman parte de la Federación, así como el empeño de aquellos que han hecho posible que este congreso se celebre en Toledo.
El viceportavoz, a la par que concejal de Deportes y Juventud, ha compartido mesa inaugural con el director general de Ordenación del Juego del Ministerio de Consumo, Mikel Arana; así como con la directora general de Tributos y Ordenación del Juego de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Susana Pastor; integrando así el Comité de Honor del XXI Congreso Nacional de la Federación Española de Jugadores de Azar Rehabilitados en el que se van a abordar las principales cuestiones que atañen, de forma directa e indirecta, a los afectados por ludopatía y otras conductas adictivas.
En este sentido, Pablo García ha destacado la labor que se lleva a cabo desde el equipo de Gobierno de la alcaldesa Milagros Tolón mediante la programación de iniciativas y actividades deportivas y de ocio para inculcar desde la adolescencia hábitos de vida saludable, propuestas que como ha indicado “han de suponer una alternativa de ocio para que nuestros jóvenes escojan de entre un amplio abanico de opciones aquellas que despierten su interés, relacionándose con otros jóvenes en un entorno saludable y acogedor que evite el consumo de esta adicción silenciosa como es el juego”.
Por último, el concejal ha compartido con la Federación la necesidad de seguir promoviendo la información en torno a estas cuestiones ante la proliferación de espacios de juego y la cercanía de los jóvenes a los mismos, lo que ha hecho “saltar las alarmas” de las administraciones públicas y del conjunto de entidades que trabajan en pro de las personas con problemas relacionados con el juego.