Personal de los Programas de Empleo del Ayuntamiento han participado en la construcción de una rampa para dotar de una mejor accesibilidad a la ermita de la Virgen de la Cabeza, una obra que acaba de concluir y que era muy demanda “desde hace años” por los miembros de la Hermandad.
La alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, que ha visitado este martes la nueva instalación, ha señalado que la medida responde al compromiso adquirido para la realización de esta infraestructura muy demanda por los miembros de la Hermandad de La Cabeza y también por los toledanos que acuden a la ermita.
Milagros Tolón, que ha estado acompañada en su visita por el hermano mayor de la Cofradía, Agustín Fernández; la concejala de Empleo, Inés Sandoval; la concejala de Accesibilidad, María Teresa Puig; la concejala de Participación, Helena Galán, y el responsable de los programas de Empleo del Ayuntamiento, Juan Carlos Fernández Layos, ha señalado que esta una más de las reivindicaciones vecinales a las que está respondiendo el Consistorio.
Con este tipo de actuaciones, “cumplimos un triple objetivo; por un lado, facilitar el acceso a personas con movilidad reducida; por otra parte, respondemos a las demandas de los vecinos y, por último, ofrecemos una oportunidad laboral a toledanos y toledanas que se encontraban en situación de desempleo”, ha dicho la alcaldesa.
Datos del paro
En este punto, Milagros Tolón se ha referido al dato del paro conocido este viernes, que vuelve a bajar en la ciudad de Toledo para situarse en 5.097 personas, siendo la capital de provincia con mejor porcentaje de desempleo. Estos datos “nos sirven como un estímulo para seguir trabajando por generar un empleo estable”.
Por su parte, Agustín Fernández ha agradecido a la alcaldesa que haya cumplido con su compromiso dando respuesta a una reivindicación “que veníamos demandado desde hace 15 años” y que permitirá facilitar el acceso a personas mayores con movilidad reducida.
Albañilería y forja
La actuación en La Cabeza, ejecutada por el Taller de Empleo, ha contado con la participación de cinco alumnos, más dos profesionales de la especialidad de albañilería y ocho alumnos de soldadura más un profesional. Además, han participado peones contratados como albañiles a través del Plan de Empleo.
Los trabajos han consistido en la realización de una rampa en tres tramos, pegada al muro de poniente del patio de la ermita. Dos de los tramos tienen cada uno algo más de nueve metros de largo y el más pequeño sobrepasa los ocho metros. A ellos hay que sumarle los descansos, que también se han ejecutado en pendiente, toda ella con un desnivel que no llega al 10%.
El muro se ha ejecutado en ladrillo revocado en piedra de la misma tonalidad que la ermita. La rampa está en su totalidad hueca, para así poder aprovechar su espacio interior, cerrándose con una reja. La totalidad de la rampa está exenta del muro, dada la baja calidad del mismo.
La barandilla es de forja y pletina en los elementos decorativos, apareciendo cruces en determinados momentos como alegoría al conjunto. Las dimensiones de las diferentes piezas se aproximan a los cuarenta metros lineales. El coste de los materiales invertidos asciendes en hierro a 3.500 euros y los de albañilería a 4.800. Los trabajos se han extendido a lo largo de mes y medio, entre septiembre y octubre.
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