Según Milagros Tolón, este convenio tiene dos objetivos primordiales: apoyar un programa social que tiene en la rehabilitación una herramienta única para potenciar la formación de jóvenes en la recuperación de nuestro patrimonio y que éstos aprendan un oficio y se especialicen en los diferentes talleres impartidos por la Escuela Taller.
“Es básico que las administraciones consorciadas hagan un esfuerzo coordinado para cuidar y conservar nuestro patrimonio declarado Patrimonio de la Humanidad”, comento Tolón. Una labor, según dijo, que se lleva cabo por la Escuela Taller de Restauración desde el año 1988.
Este convenio cuenta ya con unas actuaciones concretas como son la rehabilitación de un edificio municipal que se encuentra en la bajada de San Sebastián, la rehabilitación de la planta baja de la Puerta del Cambrón y la mejora medioambiental de los alrededores del Circo Romano.
Este convenio también hace hincapié en la apuesta por el empleo llevado a cabo por el Ayuntamiento a través de la Escuela Taller.
Según Tolón, “queremos incidir en posibilitar la salida de los jóvenes al mundo laboral”. De esta manera, explicó que en las escuelas taller no solo se ofrece un contrato laboral y una especialización, sino que también se realizan acciones de diagnóstico y tutorías individualizadas para preparar a los jóvenes para su incorporación al mercado laboral.
Esta “doble función” que cumple la labor de la Escuela Taller, comentó Tolón, es la de ofrecer formación especializada en los talleres de albañilería, carpintería, electricidad, cantería, vidrio, y cerámica y “prepararles para su inserción laboral”.
Por su parte, el Gerente del Consorcio, Manuel Santaolaya, comentó que “la idea clave” de este convenio es que la Escuela Taller combina la recuperación del Casco Histórico y la inserción laboral de los jóvenes.
Por ello se mostró proclive a continuar apoyando la labor de la Escuela Taller mediante la firma de convenios “que garanticen la recuperación integral del Casco Histórico”.