Emiliano García-Page ha afirmado que la situación en que se encontraba esta acera “es un absurdo”, no sólo desde el punto de vista estético –se encuentra en la principal entrada a la ciudad- sino también por los problemas de accesibilidad que presentaba.
Para el alcalde, esta intervención es un ejemplo “de lo que nunca tenía que haberse hecho” y del empeño que el equipo de Gobierno va poner en la presente legislatura para eliminar barreras arquitectónicas, facilitar el tránsito a las personas con movilidad reducida y unificar los criterios estéticos de las dotaciones urbanas.
La concejal de Familia y Accesibilidad, María Teresa Puig, ha explicado que la nueva acera que se está construyendo cumplirá con los criterios de accesibilidad establecidos por ley, “permitiendo a todo el mundo transitar por la zona no sólo de manera más cómoda sino también con seguridad” ya que se evitará situaciones de riesgo por la proximidad de los muchos vehículos que circulan a diario por la calle Marqués de Mendigorría.
Esta actuación además va a permitir completar urbanísticamente la zona, ya que al no existir acera daba la sensación de ser una área inacabada como sucedía en otros sectores de la ciudad y que, progresivamente, el Gobierno municipal ha ido solucionando.
Puig ha recordado otra actuación similar que el Consistorio ha llevado a cabo en la misma calle, a la altura del Colegio Tavera y el Palacio de Justicia, donde el Ayuntamiento construyó una nueva acera y unas rampas accesibles en una zona donde antes tampoco existían aceras.
Este tipo de obras las realizan los operarios municipales, dentro de las partidas propias para el desarrollo de obras pequeñas y reparaciones en la vía pública. En este sentido, la concejal de Accesibilidad ha explicado que, en colaboración con la Concejalía de Participación y las asociaciones vecinales se va elaborar un mapa de la ciudad en el que realizar actuaciones precisas que mejoren la accesibilidad.
Con estas pequeñas actuaciones, el Ayuntamiento continúa mejorando la movilidad y la accesibilidad de los ciudadanos, lo que repercute en su calidad de vida, siendo esto también un claro ejemplo de que el Gobierno municipal es sensible con los detalles para los vecinos de Toledo.
Entorno de Los Gavilanes
En cuanto al litigio que persiste en el espacio frente al restaurante Los Gavilanes y que impide su adecuación, el alcalde y la concejal han anunciado que en el próximo otoño mantendrán contactos con los implicados para llegar a un acuerdo que permita que se complete la mejora estética y de movilidad en la calle Marqués de Mendigorría.