Este solemne acto estuvo presidido el Presidente del Congreso de los Diputados, José Bono, el Presidente de Castilla La Mancha, José María Barreda y el Alcalde de Toledo, Emiliano García- Page.
En él, el regidor municipal alabó las “convicciones democráticas y el pensamiento liberal y progresista” del homenajeado así como su “apabullante y comprometida personalidad”.
En su alocución, el alcalde de Toledo recordó un artículo escrito por Gregorio Marañón en el diario El País en 1982 titulado “Salvar Toledo” en el que denunciaba la destrucción del patrimonio en el Casco Histórico. “El artículo fue una especie de aldabonzazo en la conciencia social toledana y a muchos sonó como toque de arrebato para remover actitudes silente”, comentó.
Ante este hecho, García-Page señaló que “si nuestro homenajeado hoy escribiese una nueva carta abierta al ministro de Cultura no podría afirmar que nada ni nadie se conmueve por la destrucción del Casco Histórico de Toledo”.
“Los toledanos tenemos ahora una mejor y mayor conciencia de la importancia de nuestro patrimonio. Ello forma parte de nuestra autoestima ciudadana. Sabemos perfectamente cuales son nuestras prioridades, hemos aprendido que trabajando todos juntos –vecinos, administraciones y entidades públicas o privadas- somos más fuertes y podemos conseguir cuantos retos nos propongamos. Nuestro patrimonio monumental, artístico y residencial está hoy mejor conservado que nunca, muy bien conservado desde el pasado reciente, y nos gusta presumir de ello. Entre todos lo hemos mejorado considerablemente nuestro Casco Histórico y aquella desidia denunciada es un recuerdo que convertiremos en pasado”.
Según el regidor municipal, Gregorio Marañón “ha demostrado y demuestra una gran preocupación por lo asuntos municipales” y recordó el “gran afán de colaboración” por materializar acuerdos entre la Real Fundación Toledo – órgano que preside -, y el Ayuntamiento de Toledo.
“Esos acuerdos han ido desde los grandes retos, como la redacción de los planes especiales del Casco Histórico o de los Cigarrales, hasta lo más menudo, como el recientemente firmado para la recuperación de fuentes públicas en nuestra ciudad”.
El regidor municipal también hizo referencia a la defensa de Vega Baja llevada a cabo por Gregorio Marañón y Beltrán de Lis.
Ante esto, comentó que “la experiencia de estos diez años de debates, declaraciones, iniciativas fallidas, aprobaciones revocadas, etc, nos han enseñado cómo deben relacionarse adecuadamente las diferentes administraciones entre sí y con los administrados para compatibilizar la conservación patrimonial, el desarrollo urbano y los intereses generales de la ciudad”.
“Afortunadamente para todos, uno de los sueños de Gregorio Marañón, es el porvenir de nuestra ciudad, capital a la que entrega el poder invencible de su pensamiento y de su generosidad”, concluyó.
Por su parte, el homenajeado- quien dijo sentir una “inmensa gratitud” – comentó que sus “posibles logros del pasado son compartidos” y que “lo único que considero verdaderamente propio es la voluntad de cumplir con el deber personal y social que me ha correspondido en cada momento”.
Marañón mostró su gratitud al alcalde de Toledo por “su infatigable quehacer, con su eficaz e ilusionado dinamismo, con el inteligente aprendizaje previo de una larga e importante experiencia política, iniciada precisamente en este Ayuntamiento, ha empezado ya a cumplir el ambicioso programa de cambio que en su día ofreció a los ciudadanos de Toledo.
De igual manera, elevó su gratitud hacia quien impulsó la propuesta de su nombramiento como “Hijo Adoptivo” de Toledo, el ex concejal Roberto López y a todos aquellos a quien han apoyado el mismo.
Marañón comentó asistir al acto “no como alguien que viene a recibir un reconocimiento debido, sino como quien viene a recoger una generosa ofrenda, que ciertamente me ha hecho muy feliz”.
“A nada más puede aspirar un ciudadano que a ser honrado por su ciudad”- dijo- porque “Toledo es la ciudad en la que se asientan mis raíces”.
Gregorio Marañón concluyó diciendo que “me siento indisolublemente parte de esta ciudadanía toledana, que he crecido aprendiendo todas sus tradiciones y que mi amor por Toledo se manifiesta en forma de un profundo sentimiento de afecto y solidaridad hacia todos mis conciudadanos, sabiendo bien que esta naturaleza sólo me confiere el privilegio de poder ostentar más deberes”.
Por su parte, el Presidente de Castilla La Mancha, José María Barreda subrayó la importancia de que este nombramiento se haga por unanimidad de todos los grupos políticos del Ayuntamiento de Toledo, “por esa capacidad para ponerse todos de acuerdo”.
Del homenajeado destacó que “siente la ciudad en su corazón y palpita por ella” y subrayó que “vive la ciudad con pasión y la razona con prudencia”.
El presidente del ejecutivo castellano manchego señaló la contribución “valiosa con sus ideas y con sus actos”.