Con esta iniciativa, el Gobierno municipal pretende aumentar la oferta turística para atraer japoneses a la capital regional creando un producto innovador y diferencial que consistirá en la creación de un paquete turístico denominado “Sakura” (cerezo).
Esta oferta exclusiva contiene, entre otras actividades, la plantación de un cerezo, una recepción oficial y la entrega de un diploma que acredite que la persona ha ejecutado dicha plantación.
Esta estrategia turística no finaliza cuando el visitante japonés se marcha de Toledo sino que continúa en el tiempo ya que establece entre el visitante y la ciudad una relación “para siempre” a través de su “Sakura” que obligará a que familiares de quien ha realizado la plantación visiten la ciudad cada cierto tiempo para comprobar cuál es el estado del árbol plantado. Con ello, se crea un gran flujo de visitantes japoneses a la capital regional que se va renovando a lo largo de los años.
Este convenio se enmarca en el IV Centenario de las relaciones Hispano-Japonesas, tiene una duración de dos años prorrogables a otros dos más y no significa desembolso económico por parte del Ayuntamiento de Toledo que se compromete a ceder espacios donde crear estos jardines de cerezos a medida que se vayan necesitando, ofreciendo por ahora, el Parque de Nara.
Suelo para 100.000 árboles
El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, se ha mostrado muy satisfecho con la firma de este convenio y se ha comprometido a disponer de todo el suelo que sea necesario en la ciudad “incluso para plantar hasta 100.000 cerezos, tantos como japoneses que nos gustaría que visitaran al año nuestra ciudad”.
“Todo el término municipal de Toledo está disponible para esta estrategia”, ha señalado, a la vez que ha puesto esta acción como ejemplo para demostrar que Toledo no se resigna ante la crisis económica y que “todos desde nuestro pequeño rincón podemos hacer pequeñas cosas”.
En este sentido, ha señalado que este convenio lo que hace es “sembrar para crecer” y alargar esta vinculación mucho tiempo porque “Japón es un pueblo fiable”.
Emiliano García-Page también ha afirmado que este convenio es una muestra de la “gran profundidad espiritual” existente entre la ciudad nipona de Nara y Toledo desde que se hermanaran el 11 de septiembre de 1972.
Otras actuaciones turísticas en el mercado nipón
Por su parte, la concejal de Turismo y Artesanía, Ana Isabel Fernández ha señalado que el Gobierno municipal prepara otras acciones para fomentar la llegada de visitantes japoneses.
En este sentido, ha comentado que se trabaja en la celebración del IV Centenario de las Relaciones hispano japonesas con la conmemoración este año del “Año de Japón en España” así como en promociones para que los nipones venga a Toledo de forma individual y no solo en grupo, como es habitual.
En este orden de cosas, ha dicho que el Ayuntamiento realizará material promocional y que se está estudiando la posibilidad de introducir el idioma japonés en alguna señalética turística al igual que se tradujo el portal web de turismo.
Además, con el Grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad de España están previstas una serie de actuaciones que fortalezcan los vínculos de ambos países.
El Jardín de los cerezos en Washington
Por su parte el presidente de la Asociación Hispano-Japonesa de Turismo, Haruo Shimohira, ha comentado que esta iniciativa del “Jardín de los Cerezos” celebra en Washington su primer siglo de vida y ha querido agradecer a los toledanos su esfuerzo y su cooperación con los pueblos del Norte de Japón arrasados por un tsunami.
En este sentido, ha asegurado que desde la asociación que preside están trabajando en la realización de exposiciones fotográficas y de artesanía niponas en Toledo para recabar más fondos para estos pueblos desfavorecidos.
Shimohira se ha mostrado muy satisfecho de las relaciones existentes entre españoles y japoneses y ha informado de que España recibe una media de 300.000 nipones al año.