En respuesta a las peticiones realizadas por los vecinos del barrio, operarios del Ayuntamiento han realizado dos pasos de peatones en la calle Río Mesa, que incluyen las medidas esenciales de accesibilidad, como la rebaja de los bordillos y un pavimento rugoso para los invidentes.
La Concejalía de Accesibilidad ha sido la encargada de tramitar la realización de estas dos intervenciones, para lo que ha contado con la colaboración de la Concejalía de Gestión de los Servicios y de Movilidad. El objetivo es garantizar el acceso a la zona en condiciones de seguridad a todas las personas y suprimir las barreras arquitectónicas para permitir el tránsito a personas con movilidad reducida.