Esta actuación, que cuenta con una inversión de 50.000 euros, consiste en la sustitución de las aceras actuales, bastante deterioradas y que dificultan el paso de los viandantes, así como su ampliación para mejorar la accesibilidad de todo este tramo.
La remodelación de esta calle se enmarca dentro de los planes de reforma urbana que el Gobierno local está ejecutando a lo largo del actual mandato municipal y que se complementa con la reforma de la calle Carreteros, colindante con Marqués de Mendigorría, y que está a punto de finalizar.
Con estas dos actuaciones y otras desarrolladas anteriormente, el Ayuntamiento pretende mejorar la imagen de todo este espacio, al tiempo que mejora la imagen de una zona que precisaba una reordenación urbana desde hacía tiempo.