Todos los grupos políticos con representación en el Ayuntamiento de Toledo han respaldado, durante la celebración del Pleno municipal y según dictamen de la Comisión de Urbanismo, la aprobación de las Ordenanzas Municipales Reguladoras de las Ayudas a la Rehabilitación de Edificios y Locales Comerciales en el ámbito de la Declaración de la Ciudad de Toledo como Patrimonio de la Humanidad, esto es, en el Casco histórico.
El Plan Especial del Casco Histórico de Toledo supuso, a partir del año 1997, una nueva gestión integral del conjunto monumental que incluía, entre otras pautas, la recuperación de la función residencial como predominante en el Casco a partir de normas y principios que regularan la puesta en valor de elementos patrimoniales.
Esta iniciativa fue reforzada con la redacción de la Ordenanza Municipal Reguladora de las Ayudas a la rehabilitación de edificios y viviendas en el Casco histórico a partir del año 2001 y ha sido objeto de diversas modificaciones, del mismo modo que la Ordenanza de Ayudas a la Rehabilitación de locales comerciales redactada en el año 2005, también fue modificada en 2008.
“Ayudas más justas y sociales”
Con el nuevo planeamiento urbano de la ciudad y la reciente anulación del Plan de Ordenación Municipal del año 2007, el Gobierno local afrontó la necesidad de implementar una nueva modificación que afecta a sendas ordenanzas para la adecuación de la norma a la situación actual y cuyo texto ha sido respaldado mayoritariamente por la Corporación municipal en el día de hoy.
Los cambios introducidos prevén reforzar y recuperar la función residencial de la vivienda en el Casco a través de ayudas para la rehabilitación y la adecuación de la ordenanza a la actualidad. “Estamos empeñados en recuperar la función residencial en nuestro Casco”, ha mantenido el edil de Urbanismo, Vivienda y Promoción Económica, Teo García, apuntando a la actualización de conceptos que intervienen de forma “importante y definitoria” como es el caso de la unidad de convivencia, en consonancia con lo establecido en el Plan de Vivienda estatal cuyo desarrollo abarca desde el presente año hasta 2021.
Otra novedad importante a la que ha aludido García es la introducción de coeficientes de cálculo de rentas familiares para lograr “una ordenanza más justa en la concesión de las propias ayudas” y, también, ha añadido, “son significativas las mejoras sociales incorporadas que tienen que ver con las medidas de acción positivas desarrolladas para personas con discapacidad y la ampliación de la acción protectora para jóvenes de hasta 35 años de edad.
En otro orden de cosas, Teo García ha aludido al compromiso que se deriva del acuerdo de las ordenanzas para poner en marcha un programa de apoyo al alquiler para residentes y hacerlo en colaboración con los propietarios.
