Tras conocerse la muerte de Aurelio Montero, el alcalde ha acudido al Tanatorio de Toledo para manifestar el pésame a los familiares de este ilustre restaurador, uno de los nombres más importantes de la cocina toledana de las últimas décadas y precursor de la Asociación de Hostelería de Toledo, de la que fue presidente.
El alcalde ha hecho extensivas sus condolencias a toda la familia hostelera de la ciudad, que ha perdido con el fallecimiento de Aurelio a uno de sus profesionales más reconocidos de los últimos cincuenta años. Sus establecimientos, dos en la calle Sinagoga y otro en la plaza del Ayuntamiento, son sinónimo de calidad y han contribuido a prestigiar la imagen gastronómica de la ciudad.