El regidor municipal le trasladó su agradecimiento “sincero, nada protocolario y muy profundo” porque, según indicó, “es realmente un disgusto para la ciudad y para la comunidad autónoma que una persona de la valía del general nos abandone”.
Emiliano García-Page reconoció que los tres años de trabajo llevados a cabo por el general en Toledo “han sido muy eficaces para la seguridad ciudadana” y reconoció que las relaciones con las administraciones públicas, entre ellas el Ayuntamiento de Toledo, fueron “extraordinariamente útiles y fluidas”.