El alcalde se mostró convencido de que el mensaje de que la conservación del patrimonio ha calado entre los toledanos llegando a entenderlo como un “motor económico que tiene mucho futuro”. En este sentido, aseguró que hace más de tres décadas no se valoraba la monumentalidad de la ciudad y los toledanos “preferían no excavar” mientras que “hoy se valora muy positivamente que aparezcan cosas”.
En esta misma línea recordó que en Vega Baja durante 11 años se debatió la construcción de 1.300 viviendas “lo que generó una polémica interesante y compleja” y que, finalmente los toledanos “ven el patrimonio como una oportunidad de futuro económico a medio y largo plazo”.
El alcalde, quien puso en valor el papel que la administración juega en la conservación del patrimonio, se preguntó si hubiera sido posible recuperar el Casco Histórico sin la “intervención directa” de lo público y, en este sentido, reclamó la “implicación concertada” de las instituciones públicas.
En argumentación de este requerimiento, el alcalde sostuvo que el casco histórico de Toledo es el segundo más grande y que “Toledo tiene cuatro veces la superficie de una ciudad de 80.000 habitantes”. Así, dijo que en la ciudad se ha construido “a lo ancho y no a lo alto alrededor del casco” para proteger visualmente el paisaje, lo que supone un elevado importe en el coste de los servicios, como por ejemplo los desplazamientos del transporte urbano.
En este orden de cosas, aseguró que es importante en España “armonizar el patrimonio a nivel fiscal” y puso como ejemplo el hecho de que en Toledo, los edificios declarados Bien de Interés Cultural estén exentos del pago de IBI, lo que significa que el Ayuntamiento no ingresa ese impuesto de estos edificios siendo muchísimos los que existen en Toledo. “Es justo que haya una armonización”, reclamó.
García-Page explicó a los asistentes al congreso que en Toledo se vive desde hace 35 años “unos años esplendorosos a nivel patrimonial” e informó de que en el Casco Histórico hay 6027 viviendas, un 70% rehabilitadas, algunas de ellas también por el sector privado.
El alcalde indicó a los congresistas que Toledo es un solapamiento de culturas y, por tanto, de muchos modelos patrimoniales y les invitó a “estudiar, investigar y aplicar aquí las mejores técnicas”.