El regidor municipal aseguró que la incorporación de estos nuevos autobuses es una novedad “interesante y necesaria que no le va a suponer coste al Ayuntamiento y por tanto a los ciudadanos” puesto que el coste de incorporación de estos vehículos será asumido por la empresa concesionaria de autobuses de transporte urbano, UNAUTO.
El alcalde de Toledo resaltó la “sensibilidad medioambiental” de la medida adoptada y aseguró que Toledo se pondría con la misma a la altura de Ayuntamientos como el de Barcelona o Málaga.
Esta política “más equilibrada y sostenible” permitirá una “optimización de costes” debido al crecimiento “a pasos agigantados” del precio del petróleo y, en consecuencia, que la ciudad de Toledo tenga “una menor dependencia del petróleo”
Según dijo el alcalde “Toledo se convertirá en una de las ciudades que más apuestas está haciendo por el medio ambiente y por un transporte sostenible”.
Dentro de las negociaciones llevadas a cabo con la empresa concesionaria UNAUTO también se contempla la incorporación, en las instalaciones de la compañía y “sin coste para las arcas municipales”, de una Planta de Gas para el Transporte. Esta infraestructura contará con los elementos necesarios para el adecuado suministro y la atención mecánica y técnica de los nuevos vehículos propulsados por gas.
El alcalde de Toledo aseguró que para el Ayuntamiento de Toledo “es una decisión importante que se enmarca en una política de transporte que está experimentando desde el primer momento el conjunto de iniciativas planteadas por el gobierno municipal”. En este sentido citó los ajustes de las líneas, el desdoblamiento de la línea 6, las mejoras en el buho-bus y la modalidad de bonificación en el servicio que estudia el Ayuntamiento de Toledo.
Por su parte, el concejal de Movilidad y Seguridad Ciudadana, Rafael Perezagua, aseguró que esta decisión “supone que los autobuses sean más limpios, menos ruidosos y más baratos” porque, según dijo, las mezclas en los carburantes, aunque en menor medida, siguen contaminando.
“Con el gas tenemos la absoluta seguridad de que la contaminación es cero”, sentenció.
Rafael Perezagua también planteó que la ciudad de Toledo se convertirá en la “avanzadilla y el modelo” para otras ciudades Patrimonio de la Humanidad.
En la actualidad Toledo cuenta con 41 autobuses propulsados por gasóleo A con mezcla de biodiésel que transportan una media de siete millones de viajeros al año.