Esta intervención, que permite completar la rehabilitación de todo el frente norte en la principal vía de acceso al Casco Histórico, se enmarca en la estrategia del equipo de Gobierno de “proteger y cuidar el patrimonio” y, además, “conseguir que nuestro pasado, nuestro patrimonio, siga siendo nuestra mejor industria”, ha dicho el alcalde.
Por su parte, el concejal de Cultura y Patrimonio, Jesús Nicolás, ha destacado la labor que realiza el Consorcio y ha recordado que en el solar donde se levantarán las dos viviendas había un inmueble muy deteriorado que afeaba un entorno que se había puesto en valor con la recuperación de la Puerta del Sol y del Cristo de la Luz; de ahí la necesidad de acometer esta actuación.
El proyecto
El proyecto interviene en los inmuebles de la calle Carretas nº 15 y nº 17. Por encargo del Consorcio de Toledo y con redacción por parte del estudio de arquitectura San Lorenzo S.L.P. la actuación pretende dar continuidad a la propuesta que, al amparo del Plan Especial del Casco Histórico de Toledo, redactó inicialmente Manuel Pina por encargo del Ayuntamiento de Toledo.
El gerente del Consorcio, Manuel Santolaya, ha explicado que el Consorcio de Toledo llegó a un acuerdo con la propiedad de sendos inmuebles para, mediante convenio, cofinanciar las obras de recuperación de los dos últimos inmuebles del Sector de Rehabilitación nº 8: Casas de la Puerta del Sol, definido en el POM, inmuebles comprendidos entre la Puerta del Sol y la Puerta de Alarcones, principal vía monumental de acceso a la ciudad de vecinos y turistas.
Se persigue con la intervención recuperar la visibilidad del cubo de muralla del que fue el primer recinto amurallado de la ciudad, de forma que se pudiera establecer, en el corto espacio que media entre la Puerta del Sol y la Puerta de Alarcones una recuperación visual del lienzo de muralla musulmán.
Se recupera el torreón defensivo, llamado cubo del Azor, a la vez que se crea una calle interior de uso privado que permite la aproximación al cubo y la contemplación de la muralla, visión que ha estado vedada hasta nuestros días por encontrarse ocupados los dos solares objeto de la intervención por sendas edificaciones en estado de semirruina.
Se obtendrán dos viviendas unifamiliares tras la intervención. En palabras de los redactores del proyecto se trata de “intercalar un vacío entre edificios y como consecuencia la propuesta esculpe una rendija entre dos volúmenes de esquinas ciegas que irrumpen como una mínima calle en la alineación principal. La ordenación permite una visión tangencial del cubo y de un mayor lienzo del paño de la muralla. La manifestación de los volúmenes limpios, ciegos, de aristas vivas, se ofrecen como contraste a las formas curvas del cubo. El espacio que formaliza la apertura para contemplar el elemento tendrá tras la ordenación carácter público y se define por un amplio tramo de escaleras y una generosa meseta, que realizará doble función de acceso a las viviendas y mirador. La orientación pública de este espacio se toma como punto de partida para el desarrollo de las viviendas, de tal forma que en ambos casos hemos diseñado un pequeño patio de acceso que permita la privacidad de las mismas, obtener un buen soleamiento, disfrutar de la visión del cubo y la muralla y permitir los lienzos ciegos y limpios en el adarve. Este carácter íntimo y doméstico que se pretende obtener en los patios se acentúa con el tratamiento de las fachadas que se recubrirán con un entablado sobre de rastreles de madera”.
La obra, que comenzó en el mes de septiembre, se prolongará durante doce meses en los que la empresa adjudicataria, Arción S.A. ejecutará el proyecto. Se ha comenzado con las labores de protección de la Puerta de Alarcones pues constituye el punto principal de entrada y salida a la obra de material y maquinaria. También se han ejecutado en el primer mes de obra las tareas de desescombro de las edificaciones ruinosas que existían en los solares objeto de la actuación. Una vez con los solares limpios se comenzarán los trabajos de erección de las dos viviendas previstas.
El proyecto contempla la consolidación y preservación del cubo y tramo de muralla ocultos por las edificaciones demolidas, preservando su integridad y recuperando su presencia para ser contemplados desde la calle Carretas. El presupuesto es de 484.626’47 euros (50% aportado por el Consorcio).