El concejal de Hacienda, José Pablo Sabrido, ha dado a conocer este lunes la memoria del Tribunal Económico-Administrativo del Ayuntamiento de Toledo correspondiente al ejercicio 2021, destacando la resolución de 92 reclamaciones de las 103 presentadas ante este organismo independiente de la gestión municipal.
En aras a la transparencia y con el objetivo de poner en valor la actividad que desarrolla este Tribunal, José Pablo Sabrido ha informado de que el 75 por ciento (76) de las reclamaciones tramitadas en 2021 corresponden a demandas contra el impuesto por el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana o impuesto de plusvalías, y el 18 por ciento (19) a multas de tráfico.
Sobre el resto, tal y como ha apuntado, tres afectan al Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), una al Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE), tres al Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO) y una más por tasas.
De las 103 reclamaciones presentadas, 81 se tramitaron por un procedimiento abreviado (importe inferior a 6.000 euros) y 22 por el procedimiento general (importe superior a 6.000 euros).
De otro lado, de las 92 reclamaciones resueltas por el Tribunal Económico Administrativo, 14 fueron estimadas, 45 desestimadas, 15 no se admitieron y 17 fueron archivadas por desistimiento o por acuerdo entre los sujetos pasivos, ha dicho José Pablo Sabrido.
En vía judicial, de las 60 reclamaciones que el año pasado no se admitieron, se han presentado 20 recursos contencioso administrativos, y en cuanto a las reclamaciones anteriores a 2021 o presentadas a inicios de ese año, los tribunales han resuelto 38 recursos: 18 desfavorables a las resoluciones del Tribunal y 16 favorables.
Órgano independiente y necesario
El concejal de Hacienda ha explicado que Toledo, según indica la Ley Reguladora de las Bases Locales, debe contar con un Tribunal de estas características dando respuesta a tres premisas. La primera, de autocontrol de la propia administración; la segunda, para facilitar una herramienta más al ciudadano, “al que le puede resultar gravoso acudir a los tribunales de justicia”, y la tercera, para “descargar de trabajo los juzgados de lo contencioso-administrativo”.
La litigiosidad minorará en 2022
José Pablo Sabrido cree que este 2022, la litigiosidad minorará de “manera importante” al haber quedado resuelto con carácter definitivo la inconstitucionalidad del impuesto de plusvalías tras la modificación de la Ley de Haciendas Locales y la modificación de la Ordenanza Fiscal Municipal que fue aprobada, ha recordado, en el pleno del 20 de enero. Ambas medidas vienen a “clarificar sustancialmente este impuesto”.
A este respecto, ha señalado que ahora existen dos métodos de cálculo. Uno objetivo, teniendo en cuenta cuál es el valor del terreno conforme al recibido del IBI, o un valor subjetivo, atendiendo a cuál sea el valor real con arreglo a la escritura de la compraventa o al documento de transmisión del bien.
Ambos métodos darán como resultado una base imponible que se determinará según unos coeficientes que dice la propia Ley y que recoge la Ordenanza Fiscal Municipal. Una vez calculada esa base, ha indicado, se aplicarán “unos tipos” que son, los que previamente recogía la ordenanza fiscal municipal “para que no hubiera el incremento del impuesto”.
Desde el punto de vista del cálculo económico, ha dicho José Pablo Sabrido, y una vez el proceso esté “perfectamente regulado”, este cambio normativo podría afectar a los ingresos futuros del Ayuntamiento en 1.200.000 euros, mientras que a los ejercicios anteriores en 4.200.000 euros.
En cualquiera de los casos, el responsable del área de Hacienda ha manifestado que las entidades locales basaron su actuación en lo que “decía la Ley” por lo que están a la espera de cuál pueda ser la actuación del Estado con respecto a los municipios que “nos sentimos perjudicados”.
Buen estado de la Tesorería
Por último, y más allá del impuesto de plusvalías, por lo que le respecta a la Tesorería del Ayuntamiento, las existencias provisionales a 31 de diciembre eran de 23.200.000 euros lo que indica “el buen estado” de la Tesorería municipal, siendo éste “el resultado de la gestión que venimos realizando desde el Ayuntamiento, tanto desde el equipo de Gobierno y de los técnicos, que nos están apoyando para poder llevarlo a cabo”.
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