En concreto el cambio de reglamento ha permitido que ahora sean 8 las asociaciones de vecinos que participen de esta junta de distrito. De esta manera, a las cuatro ya existentes (Iniciativa Ciudadana, Cornisa, Puerta del Vado y La Candelaria), se han sumado las AAVV de Santo Tomé, La Mezquita, El Cigarral y El Zoco.
Ante estas agrupaciones vecinales, Guijarro desveló algunos de los principales proyectos que se están ejecutando en el barrio. En concreto, informó sobre la reciente finalización de las obras de recuperación del talud de San Miguel gracias a las labores de limpieza, consolidación, creación de muros de contención y plantación de más de 100 especies arbóreas a través del Taller Medioambiental de la Escuela Taller. También les adelantó que las obras de actuación en la muralla del Puente de San Martín avanzan “a buen ritmo” y les recordó que los 300.000 euros invertidos para la mejora de esta infraestructura son fruto del compromiso alcanzando por el alcalde con la ex ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde.
En este orden de cosas, Guijarro también informó sobre la marcha de las obras de recuperación del talud de San Cristóbal así como del proceso de consulta abierto con los vecinos para la puesta en marcha de dos microbuses en el Casco Histórico.
Antonio Guijarro aseguró que el objetivo del gobierno municipal es ofrecer gran participación a los vecinos así como captar su “complicidad” a la hora de ejecutar proyectos para los barrios. En este sentido, recordó el compromiso de que los concejales de las diversas áreas comparezcan en las juntas de distrito y comunicó que en la de ayer la concejal de Bienestar Social, Ana Saavedra, compareció para tratar asuntos relacionados con los recortes de la Junta de Comunidades en materia de servicios sociales.
De esta manera, la concejal trasladó a los vecinos la preocupación del gobierno municipal por la decisión de la Junta de Comunidades de echar el cierre a la residencia de ancianos del Hospitalito del Rey, pese a estar ya equipada y lista para su uso así como por la paralización de las obras de la residencia San Juan de Dios, por parte de la Diputación Provincial.
Guijarro comentó que estas dos infraestructuras son vitales para el Casco Histórico debido a la elevada población anciana del mismo y se apoyó en esta hecho para asegurar que la idea del gobierno municipal ante la actual situación económica es “que la crisis no puede condenarnos ni paralizarnos y muestra de ellos son las actuaciones concretas que llevamos a cabo en cada barrio”.