El alcalde, acompañado de la concejal de Accesibilidad, María Teresa Puig, comprobó una actuación llevada a cabo en el entorno de Santa Casilda donde las irregularidades en la acera y en las losetas que la conforman provocaban tropiezos a los viandantes.
Además, se acercó a la Avenida de Portugal para observar el acabado del rebaje de un paso de peatones.