García-Page recibió a la ministra en las Casas Consistoriales, en cuyo Libro de Honor firmó, y donde el regidor municipal le obsequió con un fac-símil de la “Chorographía del río Tajo” realizada por Luis Carduchi, la cual recoge un proyecto de año 1640 para hacer navegable el río Tajo hasta Portugal y ser utilizado para el traslado de tropas.
Tras la breve visita al Ayuntamiento, la comitiva se desplazó a la Catedral Primada de Toledo donde tuvo la oportunidad de conocer el resultado del proyecto de las obras de reforma y restauración del Claustro del templo. Una obra que ha sido redactado por los arquitectos de la Universidad Politécnica de Madrid, Valentín Berriochoa y José Miguel Merino y que ha consistido, principalmente, en la puesta en valor del claustro ofreciendo solución técnica a los problemas de cubiertas y el sistema de recogida y evacuación de aguas. Además, se han rehabilitado las instalaciones del Archivo, se ha acondicionado la zona ajardinada y se han restaurado varios frescos. La obra ha tenido un coste de 6,6 millones de euros.
El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, se mostró agradecido de la inversión que la ciudad ha recibido del Ministerio de Cultura en los últimos cuatro años, que asciende a más de 8 millones de euros destinados a varias actuaciones sobre el patrimonio artístico y cultural.
García-Page argumentó que “la mejor industria que tiene Toledo es su patrimonio” y la Catedral el primer referente del mismo. Por ello dijo que la apertura en próximas fechas de los remodelados accesos a la ‘Campana Gorda’ de la torre del edificio es un “importante reclamo turístico” en el que se ha trabajado también con una “perspectiva sentimental”.
Por otro lado, el alcalde también manifestó que en próximas semanas se reunirá con Ángeles González-Sinde para abordar asuntos relacionados con la ciudad.
Por su parte la ministra explicó que la conservación del patrimonio “es una vía de futuro y un elemento generador de empleo”.
Seguido a este acto, las autoridades acudieron al Museo Sefardí donde se explicó el proyecto de adaptación del mismo a personas con discapacidad visual y auditiva, realizado por la Fundación Orange, en colaboración con la ONCE y el Ministerio de Cultura y que ha permitido que se adapte la exposición a personas ciegas para que puedan realizar su visita a las salas del museo de forma autónoma.
Así, se da la existencia de un conjunto de hitos expositivos adaptados a lo largo del recorrido de la exposición y material de apoyo informativo adaptado como planos en relieve y audio-guía.
En el acto, además de la ministra, el presidente regional y el alcalde estuvieron presentes el director del Museo Sefardí, Santiago Palomero, la directora General Adjunta de la ONCE, Patricia Sanz, el director General de la Fundación Orange, Manuel Gimeno.
El primer museo accesible para discapacitados visuales y auditivos
En este lugar, el alcalde de Toledo se mostró muy satisfecho de que el Museo Sefardí sea el primero de titularidad estatal en el que se haya aplicado esta técnica y lo consideró muy importante porque es sinónimo de una sociedad avanzada.
En este sentido, aseguró que los avances en la sociedad pasan por “cómo tratamos el Medio Ambiente, cómo tratamos el Patrimonio y cómo tratamos e integramos a los discapacitados”.
Ángeles González-Sinde se mostró satisfecha de que este proyecto signifique “acogida y no rechazo, inclusión y no exclusión” y comentó que en España hay 4 millones de personas con discapacidad, más de la mitad, de tipo visual y auditiva.
Por su parte el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, aseguró que “en la vida a todos nos iguala nuestra condición de personas, de seres humanos” y matizó que las sociedades son más “modernas, justas y civilizadas en la medida en que tratan bien a quienes necesitan más ayuda de los demás”.