El equipo de Gobierno ha dado cuenta este miércoles en el Consejo Municipal de Medio Ambiente de las actuaciones que se van a llevar a cabo para la puesta en valor y recuperación del Parque de la Vega tras los daños sufridos por el temporal de frío y nieve tan acuciante que se registró el pasado año.
En el transcurso de la reunión, la concejala de Parques y Jardines, Marta Medina, ha recordado que este episodio produjo un grave deterioro sobre el arbolado urbano de la ciudad y en especial, sobre el Parque de la Vega, de alto valor medioambiental e histórico y que data de 1870.
Dada su importancia y al tratarse de uno de los pulmones verdes de la ciudad, el Gobierno municipal inició un proceso para determinar los principales árboles afectados, llegando a estudiar cerca de 150 ejemplares.
Posteriormente, respondiendo a las recomendaciones de los servicios técnicos municipales, se llevaron a cabo trabajos de retirada de árboles volcados por la nieve y ramas tronchadas, además de labores de saneamiento y equilibrado de copas.
A partir de ahí, comenzó la fase de seguimiento y observación para ver la evolución de los ejemplares más afectados. En este periodo, se necesitó la ayuda de los Bomberos de Toledo, por seguridad, para eliminar árboles de grandes dimensiones y dificultad de acceso que no respondían a los tratamientos.
En este momento, tal y como se ha informado en el Consejo de Medio Ambiente, y una vez constatado de que algunos árboles no se han podido recuperar de las fuertes e intensas heladas, se procera a la eliminación de los mismos ya que están secos o muertos.
Para paliar esta situación y con el objetivo de engrandecer y dar vida a uno de los parques más singulares de la ciudad, el Gobierno municipal prepara un ambicioso proyecto para el Parque de la Vega con cargo a los Fondos Europeos ‘Next Generation’ concedidos por el Gobierno de España a través del Grupo Ciudades Patrimonio de la Humanidad que incluye plantación y la recuperación de las zonas verdes.
En la reunión del Consejo Municipal de Medio Ambiente que ha tenido lugar en el Centro Cultural San Marcos han participado, bien de manera presencial o telemática, concejales de todos los grupos políticos con representación en la Corporación municipal, además de miembros de la Federación Empresarial Toledana.
Como público, han acudido los ambientólogos Enrique García Gómez y Eduardo Sánchez Butragueño. Ambos han tomado la palabra para destacar la importancia del arbolado como una cuestión de salud pública más que ornamental, que debe ser un elemento urbano básico dentro de cualquier proyecto que se lleve a cabo en la ciudad.
También han manifestado que se debe abundar en la calidad de la planificación y los ejemplares y no en la cantidad, y esperan que haya un cambio en la estrategia de la masa arbórea de Toledo con especies autóctonas y ejemplares que se adapten al clima de la capital regional.