A principios de enero de 2021, una nevada histórica provocada por la borrasca Filomena colapsó el interior del país, siendo nuestra ciudad una de las más afectadas, provocando en ella importantes daños materiales, tanto públicos como privados. Comenzaba así un año extraño condicionado por la persistencia de la pandemia mundial.
Todos recordaremos esos días 7, 8 y 9 de enero que se iniciaron con la alegría de ver nevar en Toledo, algo que con el cambio climático es cada vez más inusual, y terminaron con la angustia y la preocupación por el colapso producido en los servicios públicos, por las dificultades en los desplazamientos, por las caídas a poco que te descuidaras, por las roturas de calderas y cañerías, por el destrozo en el arbolado… Son días que no olvidaremos.
Pero sin duda en esas imágenes que guardamos en nuestra memoria hay belleza. Es lo que nos transmite las fotografías tomadas de la ciudad, casi todas del entorno del puente de San Martín, por Roberto Gómez, al que agradecemos que las haya querido compartir con todos los toledanos.