El Ayuntamiento continúa con la campaña de limpieza de pintadas en muros y espacios públicos iniciada en el mes de marzo con la intervención en la pasarela peatonal ‘Santa María de Benquerencia’ que cruza la N-400 y une la zona residencial del Polígono con la industrial.
Estos trabajos se suman a las labores habituales de limpieza de este tipo de actos que atentan contra el patrimonio urbano de la ciudad. La renovación de superficies que han sido objeto de este tipo de pintadas se lleva a cabo atendiendo a criterios técnicos, estudiando el material sobre el que se ha ejecutado el grafiti.
De este modo, el personal de limpieza interviene en estas superficies a través de dos vías, bien utilizando una serie de productos y disolventes, o directamente aplicando una capa de pintura si el espacio es poroso, es el caso de los muros de hormigón.
Desde la Concejalía de Limpieza Viaria, el concejal delegado Ramón Lorente pide responsabilidad ciudadana sobre todo a aquellos que realizan actos vandálicos como estos, que juegan en contra de la imagen de la ciudad y su reparación y limpieza supone para arcas públicas municipales un esfuerzo económico importante.
Destacar que el artículo 32C de la Ordenanza Municipal de Limpieza recoge que los autores de estas pintadas pueden incurrir en una falta grave que implica sanciones entre los 1.501 y los 3.000 euros.