Las alegaciones a los presupuestos municipales son “incongruentes”, manifiesta el gobierno municipal, debido a que se reducen y aumentan partidas de manera ilógica,” sin sentido o justificación” ; así como “incompletas porque se desconoce el origen y el destino de las mismas”.
En relación al gasto corriente, el gobierno municipal realiza recortes de manera generalizada porque lo que no se puede es recortar en la limpieza de colegios, el alumbrado público o en la subvención al transporte urbano tal y como apunta el PP. Asunto, por otro lado, que resulta curioso teniendo en cuenta que fue el PP, en su etapa de gobierno, quien negoció el contrato del transporte público en la ciudad.
El gobierno municipal se pregunta por tanto cómo realizaría el PP el presupuesto municipal para el año 2010 si su pretensión es disminuir los impuestos “especialmente a los que más defraudan”, recortando el gasto corriente y las inversiones.
La “ocurrencia” del PP es eliminar el préstamo de 3 millones de euros lo que es igual que indicar que es eliminen tres de los 5,4 millones de inversiones. Algo que lleva al gobierno municipal a preguntarse cómo pretende el PP que se financie la ciudad de Toledo.
En este sentido, y ante la propuesta del PP de financiar los proyectos con los fondos del Plan E para el 2010, el gobierno municipal recuerda al partido de la oposición que el principal requisito del gobierno de España es que los proyectos del Plan E no estén presupuestados por lo que no pueden estar incluidos, como es obvio, en los presupuestos municipales.
En relación al endeudamiento, el gobierno municipal considera que lo razonable es que las inversiones que se realicen se financien con préstamos y que los toledanos, con sus impuestos, sean quienes paguen, por tanto, estas inversiones.
Por otro lado, el gobierno municipal indica que si el Ayuntamiento acude al préstamo es porque dispone de margen suficiente. En este sentido, asegura que, a pesar de los15 millones de euros del crédito extraordinario y de los 3 millones del presupuesto, queda a las arcas municipales un ratio de endeudamiento mucho menor del que tenía el PP cuando gobernaba.