El portavoz del Gobierno Municipal ha resaltado que este proyecto, que también contempla el intercambiador de transportes en Safont, permitirá adoptar nuevas políticas de acceso al Casco Histórico. Como sistema complementario los nuevos remontes incluyen, también, un ascensor, para posibilitar la accesibilidad de los mismos. Una vea concluida esta obra, cualquier persona con movilidad reducida podrá acceder desde la zona de la Estación de Autobuses al Paseo del Miradero sin encontrar ninguna barrera arquitectónica.
La financiación de este proyecto se contempla dentro del convenio suscrito entre el alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, y la vicepresidenta de la Junta de Comunidades, Maria Luisa Araujo, para la construcción de las nuevas escaleras mecánicas del Miradero. El presupuesto final del proyecto se encuentra pendiente de cerrar en los próximos días con las últimas mediciones y consideraciones técnicas.
Junto al desarrollo de estas nuevas infraestructuras para mejorar la movilidad, el proyecto contempla la construcción de una gran plaza en el barrio de Antequeruela y unas escaleras de acceso desde el entorno de las ruinas del antiguo convento de San Pablo a la Bajada de los Desamparados.