Emiliano García-Page, quien estuvo arropado por niños de los colegios San Lucas y la Medalla Milagrosa, indicó que “este no es una acto cualquiera” porque “vosotros le ponéis hoy una nota de color, le ponéis un sentido especial a una inauguración”.
García-Page se dirigió a ellos indicándoles que éste es un belén que se pondría en “cualquier familia” y agradeció encarecidamente el trabajo elaborado para su montaje a los funcionarios encargados del mismo, Germán y Mariano.
“Esta es la casa de todos, de todos los toledanos y las toledanas a los que invito a que vengan al Ayuntamiento, además de a pedir licencias o a establecer quejas- que están en todo su derecho-, a disfrutar de la navidad con el cariño que le hemos querido poner, fundamentalmente los trabajadores”, dijo el edil.
El alcalde de Toledo aseguró que “un belén es un canto a la fiesta que tenemos y hoy, especialmente, me interesa resaltar mucho que en el fondo lo que estamos celebrando es un canto a la vida”.
“La Navidad nos inspira a todos unos sentimiento tiernos, amables, intentamos mirar más lo que nos interesa como sociedad, lo que nos uno que lo que nos separa, y ese espíritu será muy bueno que se prolongara incluso todo el año”, manifestó García-Page.
El regidor municipal agradeció la labor a quienes han hecho el belén “con mucho mimo, con mucho detalle, con mucho cariño” y manifestó su deseo de que los toledanos y toledanas disfruten de las fiestas con la familia y los amigos y manifestó su deseo de que “el espíritu que nos une esta Navidad y en todas las Navidades, pueda permanecer el mayor tiempo posible”.
A los pequeños que han amenizado el acto con sus cantos, acompañados de la música de Ana Alcaide les deseó “que tengáis muy buenas notas en el 2008, la misma nota que me gustaría conseguir a mí en el Ayuntamiento con todos los toledanos”.