El 31 de mayo de 1983, en la iglesia conventual de san Pedro Mártir, tuvo lugar la sesión constitutiva de las Cortes de Castilla-La Mancha. Tres años después se inauguraba su sede actual en el antiguo convento de san Gil (Gilitos). Muchos hemos conocido estos acontecimientos pero no son tantos lo que saben que nuestra ciudad fue en siglos pasados sede de las Cortes celebradas por la Corona de Castilla, junto con otras capitales como Valladolid, Madrid, Burgos… Y que, además, procuradores toledanos, elegidos por su ayuntamiento, asistieron a todas las reuniones de las Cortes convocadas por los monarcas españoles desde mediados del siglo XIII hasta principios del siglo XIX.
La presencia de Toledo en las cortes medievales y modernas ha quedado reflejada en un buen número de documentos de entre los que destacan los Cuadernos de Cortes. En el Archivo Municipal hemos procedido a la restauración de los más deteriorados, a su digitalización y a su descripción con el fin de ponerlos ahora a disposición de todos los interesados.