González-Blanco Gutiérrez, María Asunción, Apuntes de Literatura Española: parte primera, Toledo : Editorial Católica Toledana, 1930, 235 p., 25 cm
En la cubierta figura desarrollado el título como: Apuntes de Literatura Española : adaptados a los programas de las Escuelas Normales y al cuestionario de oposiciones a Escuelas Nacionales : parte primera.
De este libro no se conservan ejemplares en la Biblioteca Nacional ni en la de Castilla-La Mancha. Sí se encuentra entre los fondos bibliográficos de nuestra Universidad regional y en la de este Archivo Municipal.
La autora, María Asunción González-Blanco Gutiérrez, aparece en él como “profesora numeraria de Gramática y Literatura españolas en la Escuela Normal de Maestras de Toledo”. Y firma su texto de presentación el 1 de octubre de 1930.
Por el estudio realizado por Enrique Sánchez Lubián sobre el pedagogo Pedro Riera Vidal sabemos que Asunción había nacido en Cuenca, posiblemente el 12 de octubre de 1892. Cursó estudios en la Escuela Superior de Magisterio de Madrid llegando a Toledo hacia 1915 para impartir clases como profesora de Gramática y Literatura en la Escuela Normal de Maestras de la ciudad. En esta institución, como nos indica también Ramón Sánchez González, desempeñó su secretaría casi de forma ininterrumpida entre 1916 y 1937. Permaneció en Toledo hasta el final de la Guerra Civil. El 31 de noviembre de 1939, como señala Teresa Martín Eced, la Comisión Depuradora de Toledo resolvió su traslado definitivo fuera de la provincia. Su nuevo destino sería la Escuela de Magisterio de la Universidad de La Laguna en Canarias (Orden de 8 de octubre de 1940, BOE de 17 de octubre) pero parece que este traslado no se hizo efectivo hasta el curso 1951-1952 (BOE de 10 de diciembre de 1951 y de 1 de diciembre de 1952). Su jubilación, aprobada por Resolución de 14 de octubre de 1959 (BOE de 2 de noviembre de 1959) le llegó cuando ejercía como profesora numeraria de la Escuela de Magisterio de Cuenca. Desde allí fijó su residencia en Madrid, ciudad donde habían vivido sus padres. El último documento que conservamos con su firma está datado en 18 de agosto de 1970 en la localidad toledana de Villaseca de la Sagra.
Sus hermanos Edmundo, Andrés y Pedro fueron reconocidos literatos; una hermana suya, Dolores, también fue profesora de Filosofía y Psicología en las Escuelas de Magisterio de Jaén y de Cuenca. De su hermano Andrés, por detenernos en uno de ellos, sabemos que realizó una extensa producción literaria, especialmente en los campos de la novela y la poesía, obteniendo diferentes premios. A él dedicó Félix Urabayen unos sentidos párrafos en una de sus “Estampas toledanas”, aparecida en el diario madrileño El Sol de 1 de enero de 1933. Había nacido en Cuenca en 1886 y murió prematuramente en Madrid en 1924.
Asunción estuvo casada, posiblemente desde 1921, con Adolfo González Vegue, archivero municipal de nuestra ciudad. Al fallecer éste, el 23 de diciembre de 1933, a la edad de 51 años, obtuvo una pensión del Ayuntamiento que mantendría toda su vida al permanecer viuda. De su enlace no tuvieron descendencia.
Sobre la obra que comentamos Apuntes de Literatura Española, su prologuista Pedro Riera Vidal afirmaba que “Es un desfile histórico de la literatura, cuidado con esmero, ordenado con pulcritud. Un desfile de ideas elegantes, de acontecimientos histórico-literarios, desde la aurora indecisa del castellano hasta la aparición del Príncipe de los Ingenios en el cielo literario español”.
La obra está estructurada en dos bloques. El primero denominado “Literatura Castellana” está formado por veinte lecciones (pp. 9-168) que serían las recogidas en el programa que impartía en la Escuela Normal. El peso de la producción literaria castellana entre los siglos XIV y XVII es muy evidente en su contenido.
El segundo bloque, bajo el nombre de “Complemento a estos apuntes”, parece corresponderse con la formación que se exigía en las oposiciones a Escuelas Nacionales. Incluye en él más de cincuenta entradas, en las que agrupa información de determinadas obras y, sobre todo, de autores.
Este libro nos ayuda a conocer qué conocimientos de Literatura se exigían a los futuros maestros y qué visión se tenía en esos años sobre los principales autores y sus obras. No hay en ella aportaciones posteriores a nuestro Siglo de Oro.
Día del Libro – 2024
Mariano García Ruipérez
Archivero Municipal de Toledo